Bueno, las vacaciones me sentaron bien. La playa, el sol, las playas cochinas de Veracruz. Una belleza. Además, leí una chingonsísima novela en mis ratillos libres: Entre Marx y una mujer desnuda de Jorge Enrique Adoum. De verdad esta novela todo mundo debería leerla. Novela-ensayo-poema. Como dice Rafa, nuestro gran clásico perdido. Mil gracias Rafa por el regalo.
La novela la edita Siglo XXI. Neta consíganla.
Pasado el breviario, a los que nos truje.
Ayer empezó ECOS III. Ya son tres ediciones de estas lecturas y me siento muy orgulloso de ver cómo ha crecido esto que empezó como una lectura entre cuates. Hoy vi el lugar lleno. Calculo unas 60 personas. Me parece todo un logro en lo personal, tomando en cuenta que la primera lectura de la primera edición fueron a lo mucho 20 personas y exagero.
Este día abrió con Daniel en un show sui generis que, si bien no fue del todo de mi agrado, tuvo calidad y trabajo detrás. Comprendo los deseos de Daniel y creo que logró algunas de sus metas. Acto de aspiraciones barthianas, conjugó música (Daniel, por cierto: se te iba el ritmo del badoleón a veces; como ves, hay que seguir la talacha), poemas y una vestimenta churriberesca. Creo que fue el momento más ovacionado de la tarde por los presentes.
Al espectáculo de Daniel le continuó la sobria lectura de Anaís Abreu. Me latió; había cosas muy buenas. Pero creo que el único punto en contra fue que a veces su lectura (no sé si su tono o el ritmo) era algo lineal. Quizás eso le quitó fuerza y claridad a sus textos, que me cae que tienen. De todos modos me quedo con el poema que leyó al final: ése sí que era fregón.
Luego siguió lo que, a mi parecer, fue el mejor acto del día: Manuel de J. Jiménez. Vestido de traje, como abogado que es, nos mostró textos de su poemarios Los autos perdidos. ¡Eso es burlarse de su profesión! Pronto tengo que hacerle una reseña a ese libro, pues siento, de verdad, que es de los tres mejores, sino es que el mejor, de todos los libros que he leído de entre los escritos por los nacidos después desde el 84 (marco este año porque según Iván Cruz, y concuerdo, es donde se acaba la generación anterior y empieza la nuestra). Tengo mucha esperanza en su trabajo.
Óscar Cid de León me gustó mucho, aunque no tanto como cuando le he leído en internet. Creo que el asunto aquí es que hay mucho contraste entre los shows y el performance (Yaxkin y Daniel) y las lecturas sencillas (como las de Anais y Óscar), esto en perjucio de los últimos. Sin embargo pienso que fue una buena lectura con buenos poemas.
Yaxkin hizo un performance grato y violento como suele ser él. Habría que decir que tengo la impresión de que cometió un delito con la bandera. Pero pues aquí el abogado es Manuel, así que si él no dijo nada, pues espero que no haya problemas.
Lo que me molestó del día de hoy fue que hubo poca atención al último acto, el de Angélica González, que desde Xalapa, se grabó en video en su casa y José Manuel nos trajo los videos. El problema fue que la gente esperaba videopoemas como los que hace Julián Herbert, y obviamente se decepcionó cunado vio a Angélica leyendo en su sala. Creo que lo que no se entendió es que esto era más bien una videoconferencia, no un videopoema. De hecho a mí me gustó mucho porque, apesar de la baja resolución, pudimos interactuar con ella kilométricamente.
Hay que agradecer a la gente de La Casa del Lago que siempre ha sido muy atenta con nosotros. Este año la promoción ha sido mayor, creo, que en años pasados. Espero esto retribuya público. Había cámaras de TV UNAM (que quiera Dios no transmitan todo el asunto Yaxkin-bandera, por motivos legales) y vi hoy unas notas en el periódico.
Espero verlos a todos la próxima semana. Estará igual de bueno. Les dejo los links de las notas de periódico. Saludos.
La novela la edita Siglo XXI. Neta consíganla.
Pasado el breviario, a los que nos truje.
Ayer empezó ECOS III. Ya son tres ediciones de estas lecturas y me siento muy orgulloso de ver cómo ha crecido esto que empezó como una lectura entre cuates. Hoy vi el lugar lleno. Calculo unas 60 personas. Me parece todo un logro en lo personal, tomando en cuenta que la primera lectura de la primera edición fueron a lo mucho 20 personas y exagero.
Este día abrió con Daniel en un show sui generis que, si bien no fue del todo de mi agrado, tuvo calidad y trabajo detrás. Comprendo los deseos de Daniel y creo que logró algunas de sus metas. Acto de aspiraciones barthianas, conjugó música (Daniel, por cierto: se te iba el ritmo del badoleón a veces; como ves, hay que seguir la talacha), poemas y una vestimenta churriberesca. Creo que fue el momento más ovacionado de la tarde por los presentes.
Al espectáculo de Daniel le continuó la sobria lectura de Anaís Abreu. Me latió; había cosas muy buenas. Pero creo que el único punto en contra fue que a veces su lectura (no sé si su tono o el ritmo) era algo lineal. Quizás eso le quitó fuerza y claridad a sus textos, que me cae que tienen. De todos modos me quedo con el poema que leyó al final: ése sí que era fregón.
Luego siguió lo que, a mi parecer, fue el mejor acto del día: Manuel de J. Jiménez. Vestido de traje, como abogado que es, nos mostró textos de su poemarios Los autos perdidos. ¡Eso es burlarse de su profesión! Pronto tengo que hacerle una reseña a ese libro, pues siento, de verdad, que es de los tres mejores, sino es que el mejor, de todos los libros que he leído de entre los escritos por los nacidos después desde el 84 (marco este año porque según Iván Cruz, y concuerdo, es donde se acaba la generación anterior y empieza la nuestra). Tengo mucha esperanza en su trabajo.
Óscar Cid de León me gustó mucho, aunque no tanto como cuando le he leído en internet. Creo que el asunto aquí es que hay mucho contraste entre los shows y el performance (Yaxkin y Daniel) y las lecturas sencillas (como las de Anais y Óscar), esto en perjucio de los últimos. Sin embargo pienso que fue una buena lectura con buenos poemas.
Yaxkin hizo un performance grato y violento como suele ser él. Habría que decir que tengo la impresión de que cometió un delito con la bandera. Pero pues aquí el abogado es Manuel, así que si él no dijo nada, pues espero que no haya problemas.
Lo que me molestó del día de hoy fue que hubo poca atención al último acto, el de Angélica González, que desde Xalapa, se grabó en video en su casa y José Manuel nos trajo los videos. El problema fue que la gente esperaba videopoemas como los que hace Julián Herbert, y obviamente se decepcionó cunado vio a Angélica leyendo en su sala. Creo que lo que no se entendió es que esto era más bien una videoconferencia, no un videopoema. De hecho a mí me gustó mucho porque, apesar de la baja resolución, pudimos interactuar con ella kilométricamente.
Hay que agradecer a la gente de La Casa del Lago que siempre ha sido muy atenta con nosotros. Este año la promoción ha sido mayor, creo, que en años pasados. Espero esto retribuya público. Había cámaras de TV UNAM (que quiera Dios no transmitan todo el asunto Yaxkin-bandera, por motivos legales) y vi hoy unas notas en el periódico.
Espero verlos a todos la próxima semana. Estará igual de bueno. Les dejo los links de las notas de periódico. Saludos.
Milenio Diario
El informador de Guadalajara
La Crónica
Había más notas, pero erán repeticiones del boletín de prensa de la Casa del Lago.